La romanización (III)

En medio de este tratado sobre la romanización, donde intento refrescar un tanto la memoria de nuestros ilustres académicos, recibo la carta de Carlos Camino, un seguidor que ha querido despejar la incógnita sobre los Capiteles vendidos por el dueño de la Abadía de Lebanza en 1927. Bajo el mandato de Alfonso VII (1158-1214), se conceden importantes donaciones a iglesias y monasterios, momento en el que resurgen nuevas formas arquitectónicas y escultóricas. Los capiteles fueron incorporados por Valzania al panteón de la iglesia, uno representando al Salvador y el otro a las tres Marías.


Los eruditos atribuyen la autoría de los capiteles a la misma mano que realizó la portada de la iglesia de Santiago en Carrión de los Condes y ya en el libro de "Cervera, Polentinos, Pernía y Castillería", menciono a Kingsley Porter, multimillonario americano, eminente profesor de Harvard de las bellas artes, viajero e investigador de la arquitectura medieval, que desapareció sin dejar rastro el 8 de Julio de 1933.

Porter, deslumbrado por la exquisitez de nuestro arte, estudia las piezas y por las inscripciones de los ábacos, afirma que está claro en qué año se hizo la obra (1185), bajo el mando de qué superior y quien fue el artista o mecenas del más linajudo abolengo castellano que hizo el arco. Como argumento decisivo de esta tesis expone que estos capiteles de Lebanza son anteriores a las más renombradas esculturas de los siglos XII y XIII. En el frente del uno aparece Cristo sedente, dentro de una nux, el otro representa al parecer la Adoración de los Reyes Magos y los Pastores. Son dos singulares piezas de escultura y epigrafía arcaicas que se encuentran en Harvard y que pueden encontrar los interesados en el apartado de Arte de mi página de Orígenes, en Facebook.

A propósito de aquella venta, ya Rafael Navarro García, en el Catálogo Monumental de la provincia de Palencia, publicado en 1939, lo define como un acto de inculta codicia, calificando a quien lo vende de "poco cristiano y poco español" y la Diputación de Palencia, en Mayo de 2005, habla del "expolio de diversos bienes patrimoniales de la provincia", si bien, discrepo un poco de tales observaciones porque el mundo de los sentimientos es muy extenso y no podemos descalificar un hecho sin situarnos convenientemente en el momento en que sucede y las circunstancias por las que atraviesa quien lo vive.

Lo que sucede con el arte, se refleja en otros muchos aspectos de la vida, que no valoramos lo que tenemos hasta que lo vemos luciendo con generosidad en otros sitios.

Para la sección "La Madeja", en Diario Palentino y Globedia.
Imagen indexada en Harvard y facilitada por Carlos Camino

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